Se accede desde el Balneario de Panticosa. En esta ocasión acudimos Rubén y yo para ascender y esquiar este bonito pico. Quedamos a las 6:00 de la mañana para evitar el calor matutino y realizar el descenso con buena nieve. Para las 8:30 ya estamos en el balneario de Panticosa. Preparamos el material, ponemos focas y tiramos para arriba. El día es inmejorable y la nieve lo cubre todo no teniendo que portear nada. El primer tramo es un poco farragoso, ya que hay que ascender por un bosque bastante empinado realizando continuas zetas. Nosotros nos equivocamos de camino y subimos directos por el colector de avalanchas situado a la izquierda del camino (lugar habitual para el descenso siempre y cuando las condiciones lo permitan). Hay que poner especial cuidado con los avalanchas y acudir con nieve asentada. Una vez superado el bosque continuamos ascendiendo con tendencia a la derecha para llegar a los Ibones de Brazato. Al pico Baciás se puede llegar desde ambos Ibones (superior e inferior). Nosotros llegamos al Pico desde el Ibón superior de Brazato. Una vez arriba las vistas fueron inmejorables (Vigñemal, Monte Perdido, Garmo Negro, Brazato..). El descenso lo realizamos por el mismo itinerario disfrutando de nieve inmejorable. Monte totalmenta recomendado para la práctica del Ski de travesía.
Desnivel: 1.100 metros
Horas de ascenso: 3 ó 4 horas hasta la cima
Garmo negro
Rubén y el Pico Bacias
Vigñemal
Macizo de Monte Perdido
Picos de Brazato
Rubén comienza el descenso
En la cima del Bacias
Fuertes avalanchas camino del Fenias
Merecido descanso en la casa de piedra
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